Localizaciones - Teatro Lara

En La Ley del Deseo (1987) Tina (Carmen Maura) representa la obra de teatro La Voz Humana, dirigida por su hermano Pablo Quintero (Eusebio Poncela) en el Teatro Lara de Madrid.

Antonio Banderas en el teatro Lara en una escena de La Ley del Deseo (1986)

El telón de la sala principal del Teatro Lara aparece, además, en los créditos finales de Todo Sobre Mi Madre (1999). Sobre los pliegues de los cortinones rojos aparece sobreimpresionada la dedicatoria de Pedro Almodóvar: «A Bette Davis, Gena Rowland, Romy Schneider... A todas las actrices que han hecho de actrices. A todas las mujeres que actúan. A los hombres que actúan y se convierten en mujeres. A todas las personas que quieren ser madres. A mi madre». También los títulos de crédito iniciales de Hable Con Ella (2002) aparecen sobre el mismo telón del Teatro Lara.

El teatro, construido por don Cándido Lara, de quien toma el nombre, se inauguró el 3 de septiembre de 1880. Situado en la Corredera Baja de San Pablo, a la sala se accede desde un amplio vestíbulo adornado con columnas de fundición. La única fachada a la calle de la Corredera se inspira en el gusto francés imperante en la época, con un sistema de cuatro arcos, con faroles traídos de París y con huecos para fijar los carteles teatrales. Sus pequeñas dimensiones, unida a una belleza singular, le hace ser conocido desde su estreno como «la Bombonera».

El Teatro Lara en la actualidad

El Lara se convirtió en el teatro burgués por excelencia. Siempre tuvo un sello elitista, de prestigio, de grandes estrenos, de actores y actrices de calidad, de público selecto. Por allí pasaron directores como Antonio Riquelme; actrices como Lola Membrives, Balbina Valverde, Rosario Pino, Leocadia Alba, Catalina Barcena o la gran Jerónima Llorente; actores como Ruiz de Arana, Ricardo Zamacois, Thulier; y dramaturgos de la talla de Echegaray o Benavente. En él se estrenaron importantes títulos de la historia del teatro español como Los intereses creados, El amor Brujo, o Canción de cuna. Desde entonces el Lara ha vivido tanto épocas gloriosas como otras en las que el abandono y la desidia han estado a punto de derribarlo o de cerrar sus puertas para siempre. En 2008 abrió sus puertas el Nuevo Teatro Lara, con una programación comercial, pero de calidad. Junto a la programación teatral, el Teatro Lara también da cabida a la música, a la poesía, o a cualquier expresión artística.