Tilda Swinton |
Tilda Swinton (Londres, 1960) es una actriz y modelo británica de ascendencia escocesa. Swinton estudia en Queen's Gate School, en Londres, West Health Girls' School, y Fettes College. En 1983 se gradúa en el Murray Edwards College de la Universidad de Cambridge con un título en Ciencias Políticas y Sociales. Es en la universidad donde Swinton empieza a actuar. También es en esta época en la que descubre el cine de Pedro Almodóvar. «Yo conocía su trabajo desde que era estudiante, como cualquiera de mi edad que haya tenido la fortuna de haber tenido cerca un buen cine. Estaba completamente enamorada de los mundos que muestra en sus películas», recuerda la actriz. Antes de comenzar su carrera en el cine a mediados de los ochenta, trabaja en el Traverse Theatre en Edimburgo y en la Royal Shakespeare Company.
Sus primeros pasos en el cine incluyen varios papeles en filmes del director Derek Jarman. «Cuando empecé a hacer mis películas con Derek Jarman en Londres, no podíamos dejar de mirar lo que hacía Pedro. Estábamos pensando largometrajes sobre nuestros respectivos universos y esos mundos estaban relacionados. No conocíamos Madrid ni lo que Pedro dibujaba en sus primeros proyectos, pero reconocíamos una sensibilidad que adorábamos», explica la actriz. Poco después, Swinton se da a conocer con el papel protagonista de Orlando (1992), la versión cinematográfica de Sally Potter de la novela de Virginia Woolf. En 1998 participa en el filme biográfico sobre el pintor Francis Bacon Love is the Devil (1998), protagonizado por Derek Jacobi y Daniel Craig.
Su carrera despega al aparecer en la saga de Las crónicas de Narnia y como actriz de reparto en películas como Constantine (2005) con Kneau Reeves, Vanilla Sky (2001) con Tom Cruise, o La playa (2000) con Leonardo DiCaprio. Obtiene el Premio Óscar a mejor actriz de reparto por su papel en Michael Clayton (2007). Desde entonces compagina el cine de masas, como su papel de El Anciano en Doctor Strange (2016) y Endgame (2019), con trabajos en cine de autor, convirtiéndose en colaboradora habitual de directores como Wes Anderson, Luca Guadagnino, o Bong Joon Ho.
Tilda Swinton conoce a Pedro Almodóvar en un evento de Hollywood en el que ambos se sienten algo fuera de lugar, sin embargo, no se produce ningún intercambio de palabras hasta su segundo encuentro. «Tuve el arrojo de decirle: Pedro, no hablo español, pero lo aprendería por ti. También puedes escribirme un personaje mudo. Por favor, piénsalo. Se rio y, pasado un tiempo, de la nada, llegó La voz humana», rememora Swinton . La actriz se encontraba en Colombia, rodando Memoria (2021) de Apichatpong Weerasethakul, cuando le llegó la propuesta. «Milagrosamente, me llegó un email con esta extraordinaria invitación. Estaba en una casita en las montañas, cuando lo abrí. Pedro y Cocteau querían que bailara con ellos».
En el cortometraje La Voz Humana (2020), Tilda Swinton interpreta a la mujer que ha sido abandonada por su amante. «Al acabar el guion, me quedé bastante noqueada. Había cogido un texto en el que se ha inspirado varias veces y lo había conseguido llevar al punto de partida. Esta versión consigue honrar la integridad del texto original, y a la vez respirar toda la identidad de Pedro. Es a la vez, puro Cocteau y puro Almodóvar. Con una diferencia, que fue la que me conquistó: ella no acaba sumida en su desesperación en bucle, sino que acaba encontrando la fórmula para su dignidad», cuenta sobre su papel en el primer cortometraje en lengua inglesa de Pedro Almodóvar.
Posteriormente participa, entre otras películas, en La Crónica Francesa (2021) y Asteroid City (2023), ambas de su amigo Wes Anderson, así como en The killer (2023) de David Fincher.
Vuelve a trabajar con Pedro Almodóvar en La Habitación De Al Lado (2024), el primer largometraje del director manchego rodado íntegramente en inglés. Tilda Swinton interpreta a Martha, una antigua corresponsal de guerra de The New York Times diagnosticada con una enfermedad terminal que toma una drástica decisión.
«Intento recordar cuándo fue Pedro explícito conmigo acerca de la película y este papel. Creo que sucedió cuando rodábamos La voz humana, pero no estoy segura porque entonces era algo incierto lo que iba a pasar tras el Covid», cuenta Swinton. «Fue extremadamente generoso al decirme que quería que volviéramos a trabajar juntos, pero entonces no especificó mucho más», apunta. «No diría que fue difícil, pero sí resultó de una responsabilidad apabullante», explica Tilda Swinton sobre un papel en el que recae todo el peso de la trama. «Me encantó tener la oportunidad porque me gusta ser la que carga a sus espaldas con las emociones. Es algo que he vivido en varias ocasiones a lo largo de mi carrera y de alguna manera lo prefiero», añade la actriz . Por su parte, Pedro Almodóvar, consciente de la importancia de hacer un buen casting, califica el trabajo de Tilda Swinton de «extraordinario». «Es una actriz muy atípica y con un físico tan particular. Creo que ha hecho muchos exotismos, pero no le había llegado un papel con esta hondura dramática. Tiene un rostro único y a mí se me cae la baba cada vez que la veo –lo hago ahora todos los días en la pantalla–, y creo que es imposible llegar tan lejos como lo hace ella en un personaje muy complejo que físicamente demandaba mucho», continúa. «La inteligencia emocional de Tilda, su educación y empatía le permiten adaptarse a todo», apunta Almodóvar. «Su belleza es única, pero, además, tiene la bondad y la curiosidad de una niña. ¿Sabes a quien me recuerda? A Chus Lampreave, que nunca perdió la inocencia y la sorpresa de la infancia. Físicamente son opuestas, pero para mí tienen el mismo espíritu».
Sobre la relación entre la actriz y el director, Tilda Swinton explica que siempre lo sintió como si fuera un primo lejano. «Pero jamás se me había pasado ni remotamente por la cabeza que llegaría a trabajar con él porque no soy española y él, de una manera que me parece muy acertada, trabajaba en su propio idioma. Nunca se me había ocurrido que en algún momento se lanzaría a rodar una película en inglés», añade. «Se ha convertido en un amigo muy importante. Encontrar a alguien así en cualquier momento de tu vida es maravilloso, pero hacerlo en este punto y pasar a formar parte de esa filmografía que tanto he admirado va más allá. Una de las mayores lecciones que aprendes a medida que te haces mayor es que hay que perder menos el tiempo e ir a por aquello que amas» . Tilda Swinton sabe lo que supone ser una chica Almodóvar. «Quizá porque he sido tan devota admiradora de su cine y lo siento tan familiar, como una canción que me sé de memoria, nunca había esperado oír esa canción con mi voz. Esos retos los realizaban mujeres que fui conociendo y adorando a través de las películas de Pedro. Las gloriosas Carmen, Marisa, Rossy, Penélope, Chus, Cecilia, Victoria, Julieta, Kiti y tantas otras. Ellas continúan el legado de las mujeres del Hollywood clásico, que crearon un mundo de ensueño para el resto: Mae, Louise, Bette, Greta, Marlene, Carole, etcétera. Ingeniosas, voluptuosas, vulnerables, apasionadas y modernas. Esos retratos almodovarianos son, en mi opinión, casi únicos, desde luego en el cine occidental, en recoger esa herencia y adaptarla al discurso moderno. Ponerme al final de ese listado es una fuente de orgullo enorme, inesperado y exquisito».